Por Natashe Yang

Yue Fei fue el general más famoso en la historia china de la Dinastía Song. Era bien conocido por ser un padre estricto con sus cinco hijos y su única hija.
Todos los días, supervisaba los estudios de literatura y de artes marciales de sus hijos. Luego de que finalizaban sus estudios diarios, Yue Fei les daba canastas y palas para que trabajaran en el jardín o en los campos. Les decía: “Cada uno de ustedes debe experimentar el duro trabajo de labrar la tierra”.
Además, les exigía que vistieran ropas de lino en vez de ropas de seda y que comieran vegetales y pan de trigo en vez de carne y vino. Aunque beber vino era muy común en aquellos días, los hijos de Yue Fei no tenían permitido beberlo, excepto en ocasiones muy especiales.
Cuando su hijo mayor, Yue Yun, tuvo 12 años, se unió a las filas de uno de los generales más destacados de Yue Fei, Zhang Xian. El pequeño Yue Yun era muy maduro para su edad. Como los adultos que lo rodeaban, él llevaba una armadura muy pesada y cabalgaba al galope mientras empuñaba su espada.
Una vez, mientras practicaba el galope cuesta abajo, no presto atención a que la pendiente estaba resbaladiza. Entonces, él y el caballo terminaron en una zanja. Yue Fei dijo muy enojado: “¿Puedes comportarte así mientras luchas con el enemigo?”
De acuerdo con las reglas militares, Yue Fei azotó a su hijo 100 veces, a pesar de que muchos generales le aconsejaban que fuese más indulgente con Yue Yun. Al ver cómo Yue Fei disciplinaba a su propio hijo, en el campamento militar todos tomaron el entrenamiento muy seriamente.
Yue Fei le pidió a Yue Yun que entrenara muy duro y que peleara con valor en el frente, así sería un buen ejemplo para todos. Yue Yun superó las expectativas de su padre y pronto se convirtió en un formidable y valiente guerrero.
En 1140, la Tribu Jin, que era militarmente superior, arrinconó a la tropa de Yue Fei en la ciudad de Yan en la provincia de Henan, China. Yue Fei envió a Yue Yun al mando de algunas tropas hacia el campamento enemigo. Le dijo a Yue Yun: “si no tienes éxito, ¡serás el primero en morir!”. Yue Yun, quién tenía una tropa muy pequeña, luchó valientemente y venció. Luego de varias batallas, el enemigo fue derrotado y el campo de batalla se cubrió con los cuerpos del enemigo.
Apenas terminada la batalla en la ciudad de Yan, Yue Yun fue enviado para ayudar al General Wang Gui a luchar contra una gran ofensiva de la Tribu Jin. Yue Yun lideró su exigua tropa de 800 soldados a la batalla. A pesar de que Yue Yun tenía más de 100 heridas y su caballo estaba empapado de sangre, se las arregló para acabar con muchos soldados enemigos, incluyendo al yerno del comandante general. Al final, la Tribu Jin fue derrotada y vencida. Para ese entonces, Yue Yun sólo tenía 22 años de edad.
Aunque la victoria fue un resultado directo de las acciones heroicas de su hijo, Yue Fei no lo elogió, tampoco informó al emperador. Yue Fei continuó alentando a su joven hijo para que redoblara sus esfuerzos con el fin de servir a la dinastía. La recompensa y el castigo eran cumplidos rigurosamente en la armada de Yue Fei de acuerdo a estrictas normas, sin embargo, Yue Fei nunca recompensó a su hijo por sus victorias, pero siempre lo castigo por sus errores.
Yue Yun jamás tuvo algún resentimiento hacia su padre por su actitud tan severa. Por el contrario, él entrenaba más duro para servir al emperador. Por eso, Yue Yun se convirtió en comandante general a la temprana edad de 22 años.