¿Haz probado recientemente leche de almendras con lavanda y te haz vuelto adicto?
Si la respuesta es si y no sabes cómo prepararla, o si la respuesta es no pero quieres intentarlo, la siguiente receta te ayudará con la preparación de una deliciosa leche de almendras con lavanda, perfectamente dulce y cremosa.
La receta
Para esta receta, se necesita:
- 6 tazas de agua filtrada,
- 1 taza de almendras,
- 1/3 de taza de lavanda seca,
- 2 cucharadas de miel cruda,
- 1/2 cucharadita de extracto de vainilla,
- 1/8 cucharadita de sal marina y…
- 1 bolsa de nueces.
Preparación
– Primero, hay que preparar el agua de lavanda y remojar las almendras. Para esto, agrega 3 tazas de agua filtrada a una cacerola junto con la lavanda seca.
– Lleva la mezcla a ebullición y deja hervir a fuego lento durante unos 20 minutos.
– Retira la cacerola de la estufa y deja que la mezcla de agua se enfríe durante aproximadamente una hora.
– Vierte el liquido en un frasco, déjala reposar en la nevera durante la noche.
Ahora, coloca las almendras en un frasco y cúbrelas con agua. Déjalas remojar durante aproximadamente 12 horas durante la noche.
Al día siguiente, saca las almendras remojadas, las cuelas y enjuagas.
Las ponemos en una licuadora y vertimos 3 tazas de agua filtrada.
– Colamos el agua fría de lavanda en la mezcla también, asegurándonos de que la lavanda se descarte.
– Trituramos las almendras con el agua durante aproximadamente un minuto.
– Cuela la mezcla con una tela como la de la bolsa de nueces.
– Agrega la mezcla colada nuevamente a la licuadora.
– Vierte 1 taza de agua de lavanda junto con los ingredientes como sal marina, extracto de vainilla y miel cruda.
– Mezclamos todo durante unos 30 segundos, en la licuadora, y listo.
Puedes consumirla en ese momento o almacenarla en un frasco de vidrio por hasta 5 días. La receta es suficiente como para preparar leche de almendras con lavanda para 4 a 5 personas.
Beneficios para la salud
En la antigüedad, la lavanda se usaba para tratar a personas con insomnio y trastornos del sueño.
En la actualidad,
«Los aromaterapeutas usan lavanda para tratar dolores de cabeza y nerviosismo o inquietud. Las terapias de masaje a veces aplican aceite de lavanda en la piel, que podría funcionar tanto como un agente calmante como una ayuda para dormir.
En Alemania, el té de lavanda ha sido aprobado como un suplemento para tratar las interrupciones del sueño, la inquietud y la irritación estomacal»,
según Healthline.
Se ha descubierto que el aceite de lavanda es letal para algunas cepas de hongos que pueden causar enfermedades de la piel.
Otro estudio encontró que la aplicación de aceite de lavanda podía cerrar más rápido las heridas en una persona.
Para las personas que sufren pérdida de cabello, la lavanda puede ser útil ya que su extracto de aceite puede promover el crecimiento del cabello hasta en un 44 por ciento después de siete meses de aplicación.
Otro dato interesante fue un estudio sobre pacientes en los consultorios dentales quienes esperaban su cita mucho más tranquilos cuando se exponían al aroma de la lavanda.
Los altos niveles de colesterol malo son un factor de riesgo para enfermedades del corazón. El consumo de algunas almendras puede ayudar a limitar dichos riesgos.
«Una dieta ADA [American Diabetes Association] que consiste en un 20 por ciento de calorías como almendras durante un período de 16 semanas es efectiva para mejorar los marcadores de sensibilidad a la insulina y produce mejoras clínicamente significativas en LDL-C en adultos con prediabetes»,
concluyó un estudio de NCBI .
Otro estudio encontró que el colesterol LDL se redujo en 5,3 mg / dL cuando una persona consumía 42 gramos de almendras por día.
Las almendras son algunas de las mejores fuentes de vitamina E que pueda encontrar. Solo una onza (0.028 kg) de almendras proporciona el 37 por ciento de la ingesta diaria recomendada del nutriente.
Las almendras también son ricas en antioxidantes, con la mayoría de los poderosos antioxidantes concentrados en la capa de piel marrón.