Criar a los hijos de forma adecuada ha sido un eterno dilema para los padres. Michaeleen Doucleff intenta aclarar algunos de los mitos asociados a la crianza.
La célebre periodista de National Public Radio (NPR) señala los errores que cometen la mayoría de los padres al educar a sus hijos, indica como sortear las «trampas» y romper con estereotipos asociados a esto.
Publicó un libro titulado Hunt, Gather, Parent :
«Cazar, Reunirse y Educar: Lo que las culturas antiguas pueden enseñarnos sobre el arte perdido de criar pequeños seres humanos felices y serviciales».
Las teorías de Doucleff surgieron durante una visita a un pueblo mexicano donde descubrió que los padres utilizaban un enfoque más práctico para la crianza de los niños en comparación con sus homólogos estadounidenses.
También viajó anteriormente a zonas remotas del norte de Canadá y a Tanzania.
Durante estos viajes, descubrió que los niños carecían de los problemas que suelen afectar a los niños de los entornos urbanos.
El elogio constante no es necesario
Doucleff cree que no es necesario elogiar a los niños constantemente, que es algo que suelen hacer los padres urbanos.
Ella cree que tiene poco sentido elogiar las tareas mundanas y simples como dibujar o leer.
En comparación, los padres de las regiones que visitó no suelen elogiar a sus hijos, sin embargo, crecieron para ser seguros, autosuficientes y con valores sólidos.
Ella piensa que la respuesta de los padres no debe ser exagerada ni excesiva. Un simple asentimiento o una sonrisa debería ser suficiente en la mayoría de los casos.
Calma y madurez
Así también, a través de sus observaciones, afirmó que la mejor respuesta cuando se trata de lidiar con una «rabieta» es la calma y la madurez.
Si los padres reaccionan con dureza, descienden al nivel de inmadurez del niño.
Por su parte, es buena idea llevar a los niños a lugares públicos, en donde conozcan a otras personas y se extienda su rango de conocimiento.
Llevar a los niños a playas, museos o parques temáticos de vez en cuando es más beneficioso que mimarlos todo el tiempo.
Más importante aún, los padres deben involucrar a los niños en las actividades del hogar, ya que esto promueve la vinculación y la empatía.
También es importante dejar que «exploren el mundo», que conozcan qué les gusta hacer y que nó, y dentro de los límites planteados por los adultos permitirles que tomen pequeñas decisiones.
No sólo los padres biológicos deben adoptar estas prácticas, dice Doucleff, sino también los encargados de las guarderías, las niñeras y los profesores.
Incluso los hermanos mayores de los niños más pequeños participan en la crianza directa o indirectamente, por ello es crucial tener un ambiente de contención y cercanía.
En general, Doucleff cree que el modelo de familia nuclear carece de muchos de los elementos necesarios para la crianza de los hijos y que un enfoque más práctico y global de la educación es más beneficioso.