Por Cassie Ryan —
Suena como algo salido del juego de Monopolio. Según la ley china, los presos pueden reducir sus penas mediante la creación de un nuevo invento.
No es de sorprender que los convictos ricos han estado explotando este «vacío legal», consiguiendo a alguien que los convierta en genios creativos.
De hecho, hay varios agentes de propiedad intelectual que publicitan un servicio efectivo para los presos inventivos, de acuerdo con el Beijing Youth Daily.
Una patente básica cuesta 6,800 yuanes (US $1.000), mientras que una más detallada tiene un valor aproximado de 50.000 yuanes o más (unos US $9.000).
Trabajando encubierto, un reportero del Daily entrevistó a un agente llamado Liu, quien dijo: «Hemos hecho muchas conmutaciones de patentes en Shaanxi. Tu puedes estar seguro. Algunos de los más ricos nos contactan cuando se meten en problemas, por lo que podemos iniciar los preparativos antes de que vayan a la cárcel».
Nan Yong, ex jefe de la Asociación de Fútbol de China, fue condenado a más de 10 años por soborno y por arreglar un partido en 2012, pero vio reducida su sentencia a un año, después de escribir una novela de ciencia ficción y conseguir cuatro patentes, incluidos dos dispositivos para entrenamiento de fútbol (una arco portátil barato y unas almohadillas de presión con sensor para medir la potencia de un tiro).
Del mismo modo, Liang Jianxing, una vez jefe de la Oficina de Salud de la provincia de Zhejiang, recibió ocho años por soborno en 2008, pero redujo su sentencia en más de un año, después de hacer 11 inventos, incluidos «tapones anti smog para la nariz».
Cualquiera que quiera pagar para salir de la cárcel de este modo, es mejor que tenga cuidado, ya que la ley exige que sea un invento propio, por lo que técnicamente ¡eso sería un fraude!
Investigación de Mona
