A lo largo de los años, muchos gigantes tecnológicos y empresas multinacionales han modificado sus anuncios publicitarios y políticas de marketing para apaciguar al régimen comunista de China.
Apple, conocida por fabricar iPhones, iPads y MacBooks, es una de las multinacionales más destacadas en este sentido. Un nuevo informe revela cómo el gigante tecnológico con sede en Cupertino, California, está complaciendo a China censurando palabras y frases relacionadas con temas como democracia, política, religión y derechos humanos.
Apple está complaciendo a China en muchos frentes
Apple está restringiendo a sus usuarios la inscripción en sus dispositivos de palabras relacionadas con estos nichos.
Esta restricción es evidente en los productos vendidos en China continental, Taiwán y Hong Kong.
El informe, publicado por CitizenLab de la Escuela Monk de Asuntos Globales y Políticas Públicas de la Universidad de Toronto (Canadá), señala:
«Gran parte de esta censura excede las obligaciones legales de Apple en Hong Kong, y desconocemos alguna justificación legal para la censura política de contenidos en Taiwán. Presentamos pruebas de que Apple no entiende del todo qué contenidos censura y que, en lugar de que cada palabra clave censurada nazca de una cuidadosa consideración, muchas se han reapropiado irreflexivamente de otras fuentes».
Según el informe, las restricciones de Apple China afectan a 1.045 palabras clave en China, mientras que en Taiwán son 397 y en Hong Kong 542.
Apple prohíbe las impresiones relacionados con la política, el activismo y las violaciones de los derechos humanos. Se niega a dejar que los usuarios impriman el número 8964 por estar relacionado con las históricas protestas de la Plaza de Tiananmen de 1989.
En Hong Kong, Apple prohíbe el uso de frases vinculadas con la Revolución de los Paraguas de 2014 y el doble sufragio universal.
En Taiwán, sus clientes no pueden inscribir frases relacionadas con movimientos religiosos prohibidos o líderes del Partido Comunista Chino.
Sin embargo, Apple se retractó del informe de CitizenLab, diciendo:
«Intentamos no permitir peticiones que puedan representar violaciones de la marca o de la propiedad intelectual, que sean vulgares o culturalmente insensibles, que puedan interpretarse como una incitación a la violencia o que se consideren ilegales de acuerdo con las leyes, normas y reglamentos locales de los países y regiones donde personalizamos y donde hacemos envios»
Apple trata las solicitudes de inscripción de forma regional
Jane Horvath, directora de privacidad de Apple, dijo que la empresa trata las solicitudes de inscripción de forma regional. Añadió que después de evaluar las sensibilidades culturales y los aspectos legales, las palabras se permiten o se rechazan para su inscripción.
Cuando los investigadores comprobaron las palabras clave en países como Canadá, Japón y Estados Unidos, descubrieron que los usuarios de Apple en esas naciones tienen que hacer frente a menos limitaciones de inscripción. En esos países, las frases relacionadas con el racismo y el sexismo están prohibidas en su mayoría.
Los investigadores de CitizenLab, Lotus Ruan y Jeffrey Knockel, escribieron:
«Dentro de China continental, descubrimos que Apple censura el contenido político, incluyendo amplias referencias a los líderes chinos y al sistema político de China, nombres de disidentes y organizaciones de noticias independientes, y términos generales relacionados con religiones, democracia y derechos humanos. Observamos que parte de la censura política de Apple en China continental se extiende a Hong Kong y Taiwán».
A pesar de la aclaración emitida por Apple sobre las conclusiones del informe, no se puede negar que la empresa se ha plegado a la agresiva censura política implantada por el Partido Comunista Chino (PCCh).
Las ganancias de Apple en China se dispararon un 87,5%
Según Apple Insider, Apple registró recientemente un segundo trimestre récord en 2021, ya que las ganancias procedentes de China llegaron a un 87,5 por ciento con respecto a un año atrás, hasta alcanzar los 17.700 millones de dólares.
En consecuencia, para mantener sus intereses comerciales, Apple está bastante dispuesta a complacer al PCCh.
China ha sido un mercado rentable para las empresas que se dedican a los gadgets y a las tecnologías. Sin embargo, el sector tecnológico en China está bajo estricta supervisión gubernamental.
El PCCh decide el contenido de Internet que se utilizará en China y las empresas tecnológicas tienen que cumplir sus normas. También aplicó en 2017 la Ley de Ciberseguridad, provocando una reacción a escala mundial.
El incumplimiento con Beijing puede llevar a la cancelación de las licencias comerciales y Apple no está dispuesta a correr ese riesgo. Por infringir las normas de Beijing, Apple también ha debido eliminar aproximadamente 1.000 aplicaciones de China.