Por David Jirard
Wu Daozi fue un famoso pintor durante la dinastía Tang y fue venerado como el «sabio de las pinturas». Su obra pictórica ha dejado muchas historias legendarias que se han transmitido de generación en generación.
Los pintores más notables de la antigua China, incluido Wu Daozi, compartían una característica similar: sus pinturas eran muy realistas.
Detrás de la viveza había un secreto: «la esencia de la vida existía detrás de la pintura».
Wu Daozi tenía habilidades que lo ponían por encima del resto. Una leyenda dice que el emperador Xuanzong le pidió que completara un mural de todo el curso del río Jialing. Wu Daozi pasó semanas recorriendo el río y regresó sin bocetos. Le dijo al emperador que todas las imágenes estaban guardados en su corazón. Luego procedió a completar el mural de memoria en solo un día.
En otra ocasión, Wu Daozi visitó una galería de arte. El personal de la galería no lo reconoció y no estuvo muy atento con él. Wu pidió un vaso de agua, pero el personal no se lo consiguió, entonces, tomó un pincel de caligrafía y comenzó a pintar en la pared. Pintó una escena con un burro y varias golondrinas. Después de que terminó, el personal quedó tan impresionado por la vivacidad de la pintura, que le ofrecieron a Wu Daozi el mejor té que tenían. Él sonrió y se fue.
La pintura de Wu Daozi cobró vida
La misma noche que Wu pintó el mural, el burro saltó de la pintura y corrió hacia una granja cercana. El granjero vio al burro mordisqueando su heno y lo persiguió. El burro corrió de regreso a la galería de arte y desapareció.
El granjero le pidió al galerista, el burro, y él galerista respondió:
«Esta es una galería de arte, no tenemos burros aquí».
El granjero no le creyó y entró en la galería a buscar al animal.
Entonces sucedió algo muy extraño. El granjero vio la pintura de Wu Doazi de un burro en la pared, y tenía un bocado de heno. Luego llegó donde estaba el personal de la galería y vio excrementos de golondrina por todas partes. Todos estaban muy desconcertados.
En la pintura de Wu Daozi realizada en la pared: la boca del burro estaba llena de heno y las golondrinas estaban en lugares diferentes que antes. ¿Qué estaba pasando?.
Un artista conocido vio la pintura en la pared y supo que era obra de Wu Daozi. Sabía sobre los efectos místicos de la obra de arte de Wu, por lo que le preguntó a un empleado si habían ofendido al pintor.
El empleado contestó:
«Quería un vaso de agua y lo ignoramos al principio, así que hizo esta pintura»
El artista sugirió:
«Quien creó esta situación debe afrontarla. Necesitas disculparte con Wu Daozi y pedirle ayuda».
Después de la disculpa, Wu Daozi regresó y pintó una cuerda para atar al burro y agregó mucha hierba cerca del mismo. También les dio a las golondrinas un nido. Después de eso, el burro y las golondrinas nunca más abandonaron la pintura.
Alguien podría preguntarse: ¿por qué el personal de la galería no se limitó a borrar la pintura en lugar de disculparse?. En este caso, la obra de arte de Wu Daozi era demasiado valiosa, así que ¿quién no querría tenerla?.
