El 10 de noviembre, una productora de televisión de Hong Kong fue arrestada bajo la «Ley de Seguridad Nacional», que implantó el régimen del Partido Comunista Chino (PCCh), acusada de hacer declaraciones falsas para obtener registros de vehículos.
La periodista de Hong Kong, Choy Yuk-ling, también conocida como Bao Choy, produjo un documental para la estación de televisión RTHK , utilizando estos registros, en donde examinó cómo la policía de Hong Kong reaccionó lentamente ante un ataque de la multitud contra los pasajeros en la estación de metro de Yuen Long el año pasado.
Aunque fue puesta en libertad bajo fianza, su arresto sucitó preocupaciones sobre el endurecimiento de las restricciones a la libertad de prensa que rige en Hong Kong.
Deteniendo a Choy
Se sospecha desde hace tiempo que las personas que llevaron a cabo el ataque en el metro eran miembros de la Tríada, un sindicato del crimen organizado con sede en Hong Kong.
El documental expone los lazos de estas personas con los líderes locales de la comunidad, y las conexiones se hicieron observando los números de matrícula de los automóviles utilizados para transportar a los atacantes.
Después de producir el documental, Bao Choy fue arrestada por violar la Ordenanza de Tráfico Vial de Hong Kong.
La Asociación de Periodistas de Hong Kong condenó el arresto y señaló que acceder a la base de datos de acceso público, como la información de registro de vehículos, es una parte normal de una investigación para esta profesión.
Acusaron a la policía de abusar de la Ordenanza sobre el tráfico vial y de suprimir las actividades informativas periódicas, dañando así la libertad de prensa en la ciudad.
La directora ejecutiva de Hong Kong, Carrie Lam, defendió el arresto, alegando que no viola la libertad de prensa.

Cuando Bao Choy fue llevada ante el tribunal, numerosos manifestantes se reunieron afuera para mostrar su apoyo, incluidos miembros del personal de RTHK.
Choy agradeció a las personas que la apoyaron durante su detención:
“Ha sido una práctica común durante años que los periodistas investiguen o busquen automóviles, vehículos y terrenos con fines periodísticos… Entiendo que este incidente ya no es un asunto personal, sino un asunto relacionado con el interés público y la libertad de prensa en Hong Kong”,
dijo Choy, según informó The Epoch Times.
Apoyo de los medios de comunicación a Choy
Daisy Li, editora en jefe de un sitio de noticias local llamado Citizens News, señala que los medios de comunicación locales se han enojado por el arresto de Choy y cree que el fuerte apoyo que ha recibido Choy es una indicación de que los medios de comunicación no tolerarán ser reprimidos por el estado.
Cale Brown, portavoz adjunto del Departamento de Estado de Estados Unidos, arremetió contra el Partido Comunista Chino y sus representantes en Hong Kong por erosionar la libertad de prensa en la ciudad.
También hay informes de que la administración de Hong Kong, luego de la Ley de Seguridad Nacional, quiere que todos los funcionarios públicos, incluidos los periodistas de RTHK, juren lealtad al gobierno.
Esta ley se aplicará a los empleados de RTHK tanto existentes como recientemente contratados. Si se implementa, podría convertir en un crimen las acciones de los periodistas de RTHK que informan negativamente sobre el gobierno.
Detención de periodistas
Choy es solo una entre varios periodistas que han sido arrestados recientemente por la policía de Hong Kong por cargos infundados.
Una periodista de 26 años, de apellido “Ho”, fue arrestada por negarse a dejar de filmar la detención de dos mujeres en baños públicos en mayo. Fue acusada de obstruir a la policía. Cuando se negó a dejar de grabar, la policía la roció con gas pimienta y le quitó la cámara.

En otro incidente, un estudiante reportero de la Universidad Bautista, hace cinco meses, en medio de una protesta, fue acusado de obstruir a los oficiales de policía y resistirse al arresto.
Si es declarado culpable, el joven de 22 años tendrá que pasar seis meses en prisión.