Dr. Li Defu
Hay un viejo proverbio chino que dice, «Si pudiera elegir, me gustaría encontrar una manera de curar el insomnio en vez de una manera de convertirse en un ser divino.»
Los síntomas del insomnio varían según la persona. Algunas personas tienen problemas para conciliar el sueño. Algunos son capaces de conciliar el sueño pero se despiertan constantemente durante la noche y les cuesta volver a dormirse. Algunas personas se despiertan con el sonido de una mosca. Algunas personas cierran los ojos durante toda la noche, pero su mente está despierta. La peor de todas las variantes anteriores es aquella en la que uno siempre recuerda algo que ha hecho o alguien a quien conoce y enseguida salta de la cama. Cuando finalmente regresa a la cama y está a punto de conciliar el sueño, se repite el mismo episodio. Por lo tanto, no puede conseguir descansar durante toda la noche.
Una vez traté a un paciente que sufría de insomnio desde hacía mucho tiempo y no puedo evitar el sonreír cada vez que pienso en éste paciente.
Ella llegó a mi clínica para el tratamiento del insomnio porque su marido era mi paciente. Esta pareja vivía en dos ciudades distintas debido a su lugar de trabajo, así como por otra de razón embarazosa. La esposa permanecía despierta toda la noche, así que ella lavaba los platos, lavaba la ropa y aspiraba el piso. A tal grado que su marido, sentía que iba a tener un ataque al corazón, pues no había podido dormir toda la noche porque su esposa había estado haciendo las tareas del hogar. El estaba teniendo dolores de cabeza y vino a mí para su tratamiento.
Cada vez que su esposa me visitaba, el venía a la clínica y me hablaba sobre el problema. La casa era más ruidosa por la noche que durante el día. El resultado era que su reloj biológico estaba al revés. Él me pidió ayuda.
Su esposa estaba siempre ocupada y no podía dormir fácilmente. Ella pensaba que el sueño era una pérdida de tiempo que le impedía trabajar. Estudió en una escuela de posgrado, y escribió la mayor parte de su trabajo de su tesis en la noche. Durante el día, ella empezaba a estar completamente agotada y se sentía somnolienta Ella se quedaba dormida cuando estaba demasiado agotada para mantenerse despierta. A pesar de que su cuerpo pudiera haber tomado un descanso durante el sueño, su mente no lo hacía.
Le pedí que se acostara, y utilicé una aguja larga de una pulgada para aplicar la acupuntura en la línea del cabello. Después de unos minutos, se quedó dormida. Despertó dos horas más tarde. Desde entonces, ella fue capaz de dormir durante la noche. Pero un mes más tarde, vino a verme para poder conciliar el sueño nuevamente. «Desde que usted me aplicó el tratamiento del insomnio, usted debería ser capaz de ayudarme ahora con mi problema de exceso de sueño, ¿correcto?» – me preguntó.
Su marido estaba junto a ella frustrado y dijo: «¿Cree usted que hay un interruptor en la cabeza que el médico utilice para controlar la cantidad de sueño?»
Le pedí a ella que se acostara de nuevo, y le apliqué acupuntura en el mismo lugar, pero con la mitad de la profundidad. Se durmió de nuevo, pero esta vez se despertó rápidamente.
Yo le dije: «Un ser humano no es lo mismo que la hierba o madera. Somos de carne y hueso, y necesitamos dormir más que cualquier otra cosa. Dormir bien puede ayudar a restablecer nuestra energía, mantener una buena salud, calmar el estómago, y fortalecer los huesos y los músculos. El hombre se supone que no tiene ninguna enfermedad. Si uno se queda trabajando durante la noche y no puede dormir con regularidad, entonces las cuencas de sus ojos se irán hundiendo y su salud se reducirá en el día. Puede ser que no se enferme de inmediato, pero finalmente se enfermará. El sueño no es un medicamento, pero ayuda a curar todo tipo de enfermedades, incluso salva vidas. Es una panacea. «
Ella parecía entender mis palabras un poco. De todos modos, después del tratamiento, no necesitó verme más. El dolor de cabeza de su marido también se curó.
