Por: Secret China
Dong Feng era un médico de la medicina tradicional china de renombre durante el período de los Tres Reinos (220-280 aC). Las personas lo buscaban para el asesoramiento y tratamiento médico y a menudo él los trataba con brebajes hechos con duraznos (albaricoques).
Nunca pidió una recompensa o dinero por sus tratamientos pero les pidió a sus pacientes plantasen árboles de durazno en el monte Lu. Plantó cinco árboles para los pacientes con una enfermedad grave y uno para aquellos cuyas condiciones eran leves.
En unos pocos años, había miles de árboles de durazno cultivados por toda la montaña. Eran hermosos y exuberantes. Los Tigres se convirtieron en los visitantes regulares de ese lugar.
Así que ¿por qué Dong Feng hizo que sus pacientes sembraran duraznos? Se debe a que el albaricoque es una fruta de verano. Sus semillas, hojas, ramas, corteza y raíces se pueden usar para preparar infusiones médicas.
El hueso, en particular, es comúnmente usado como un expectorante y calmante de la tos, así como para aliviar el asma y humectar los pulmones.
Dong Feng hizo un buen uso de los árboles de albaricoque para curar las enfermedades de muchas personas, sin gastar un centavo. Durante miles de años, la ética médica de Dong Feng ha servido de modelo para la comunidad médica.
Dong Feng intercambiaba los duraznos maduros por arroz para darlos a las personas en situación de pobreza. El dicho «La benevolencia del árbol de durazno» (
Xing lín Chun nuán) se popularizó por esta razón.
Se cuenta que una vez, hubo un joven oportunista que dio poco arroz a cambio, pero tomó una cesta (canasta) llena de duraznos. Un tigre que custodiaba los duraznos gruñó y se abalanzó sobre él en el momento que tomó la canasta. El joven tropezó al huir y tuvo que abandonar los duraznos que cayeron.
Cuando llegó a casa el joven se percató de que sólo quedaron tantos duraznos como la cantidad de arroz que dejó. Así es como el proverbio chino surgió: «Los duraznos son custodiados por un Tigre»
(
Hú Ju Xing Lin).
