Hay un dicho:
«Ríete una vez y tus preocupaciones desaparecerán. Ríe dos veces y tu ira desaparecerá. Ríete tres veces y tus arrepentimientos se atenuarán. Ríe cuatro veces y vive una vida saludable. Ríe cinco veces y siéntete siempre joven. Ríe seis veces y libérate. Ríe a menudo y vive una larga vida»
Decir que la risa es la mejor medicina puede sonar poco realista, pero la risa es un antídoto natural para las enfermedades y las emociones negativas.
Puede aliviar el dolor, combatir la depresión y mejorar las enfermedades sin efectos secundarios. Los estudios han descubierto que cuando la gente ríe, sus estados mentales y físicos experimentan cambios positivos.
El dolor se detuvo
Un pastor fue hospitalizado debido a lesiones. Tenía fuertes dolores y a menudo tomaba medicación para el dolor. Cada vez que el dolor se hacía insoportable, pulsaba un timbre de llamada, y la enfermera le ponía inmediatamente una inyección. Esto se convirtió en una rutina diaria.
Un día tocó el timbre de llamada, se puso de lado como de costumbre de espaldas a la puerta, levantó su bata exponiendo la parte inferior de su cuerpo y esperó a la enfermera.
Oyó que la puerta se abría pero no oyó a nadie moverse. Así que apuntó a sus partes bajas y preguntó: «¿Por qué no me das la inyección?»

Levantó la vista después de un momento de silencio y había una señora de pie junto a la cama, ¡una colega de su iglesia! La señora se fue después de que intercambiaran algunas palabras. El pastor estalló en risa después de repasar el embarazoso momento en su mente.
Cuando la enfermera entró, él estaba llorando de tanto reír. Quería explicarle las cosas a la enfermera, pero no podía parar. Cuando finalmente pudo concentrarse, ¡notó que el dolor había desaparecido!
Vencer la enfermedad con la risa
Norman Cousins, el autor de Anatomía de una enfermedad, sufría de Espondilitis Anquilosante (EA), una enfermedad inflamatoria crónica que afecta principalmente a la columna vertebral.
El doctor dijo que la enfermedad no podía ser tratada y que sólo le quedaban unos meses de vida. La enfermedad le causó un dolor insoportable y quedó casi completamente paralizado.

Cousins salió del hospital y se registró en un hotel. Comenzó a tomar altas dosis de vitamina C y comenzó a ver comedias divertidas. Pudo dormir tranquilo y sin dolor durante 2 horas después de 10 minutos de risa.
Su condición mejoró constantemente. Finalmente, ganó suficiente movilidad como para poder trabajar. Vivió otros 20 años o más.
Traducido por Elaine y editado por Helen