Por Rory Karsten
Uno de los principales investigadores del mundo de la sustracción forzosa de órganos autorizada por el Estado en China, fue galardonado con un premio de derechos humanos en Canadá.
David Matas, abogado internacional de derechos humanos con sede en Winnipeg, recibió el primer premio al Líder Humanitario Mundial del Año, otorgado por el grupo de derechos humanos Canadian in Support of Refugees in Dire Need (CSRDN).
El premio agradeció a Matas por décadas de dedicación a la causa de los derechos humanos y especialmente por su trabajo, el cuál documenta los horrores de la extracción forzada de órganos en China.
La Dra. Aliya Khan, copresidenta del CSRDN declaró:
«Queremos reconocer las tremendas contribuciones de David a salvar vidas y a la justicia al hablar en contra de los horribles crímenes de la extracción forzada de órganos en China».
«Matar a la gente por sus órganos es una práctica muy cruel y bárbara y debe ser detenida».
Un defensor de los Derechos Humanos
La declaración del premio dice que Matas dedicó su vida a defender los derechos de los más vulnerables de la sociedad.
Es abogado y autoridad reconocida en materia de derechos humanos, inmigración y derecho de los refugiados, se desempeña como asesor jurídico superior de B’nai Brith Canadá y participó en numerosos grupos nacionales e internacionales de derechos humanos.
Fue nombrado a la Orden de Canadá en 2008 por sus contribuciones a la legislación de derechos humanos y al derecho de la inmigración y los refugiados.
Matas es también cofundador de la Coalición Internacional para Acabar con el Abuso de los Trasplantes en China (ETAC), que es una coalición de abogados, académicos, especialistas en ética, profesionales de la medicina, investigadores y defensores de los derechos humanos dedicada a poner fin a la extracción forzosa de órganos en China.
Otro cofundador de ETAC es el ex parlamentario canadiense David Kilgour, que realizó investigaciones con Matas en 2006 sobre las denuncias de que practicantes de Falun Gong en China estaban siendo asesinados por sus órganos.
«Después de meses de investigación, incluyendo entrevistas encubiertas con médicos de 12 provincias de China, llegamos a la lamentable conclusión de que estas acusaciones son ciertas»,
dijo Kilgour en aquel entonces.
En su investigación también examinaron los programas de trasplante de cientos de hospitales en China, basándose en los informes de los medios de comunicación, la propaganda oficial, las revistas médicas, los sitios web de los hospitales y un gran número de sitios web borrados que se encuentran en los archivos.
Los dos canadienses se unieron al periodista de investigación estadounidense Ethan Gutmann (también nominado al Premio Nobel de la Paz) en 2016 para publicar otro informe: Bloody Harvest/The Slaughter: Una actualización.
Extracción forzada de órganos
En el informe anteriormente mencionado, estiman que en China se realizan entre 60.000 y 100.000 trasplantes cada año y afirman que el principal objetivo de la extracción de órganos es de los chinos que practican Falun Gong.
En menor medida, los uigures, los tibetanos y algunos cristianos clandestinos también han sido asesinados con el fin de obtener órganos para trasplantes, según el informe.
Más recientemente se teme que los uigures y otros musulmanes turcos se conviertan cada vez más en blanco de la recolección de órganos, con más de un millón de ellos retenidos en campamentos en la región del extremo occidental de Xinjiang en China desde 2017.
El mes pasado se anunció que tres legisladores estadounidenses estaban presentando un proyecto de ley destinado a poner fin a la extracción forzada de órganos de prisioneros de conciencia en China, sancionada por el Estado.
El siguiente video es de un reciente episodio de China sin censura sobre la extracción forzada de órganos en China, en el que aparece Matas.
Te invitamos a verlo (activar los subtítulos y el traductor automático).
