Sentirse frustrado, como todo el mundo sabe, es un sentimiento horrible. La mayoría de la gente la ha experimentado en algún momento de su vida.
La frustración no es una emoción fácil de sobrellevar, incluso esa frustración puede provenir desde tu juventud y si no has aprendido a lidiar con la emoción en la edad adulta, encontrarás difícil vivir en sociedad.
La frustración es una emoción negativa que puede llevar a resultados muy desagradables. Los padres pueden ayudar a los niños a encontrar una salida a sus sentimientos, entendiendo mejor la emoción y su función.
¿Que es la frustración?
La frustración es una emoción, una cruda sensación en tu cuerpo. Experimentamos la emoción cuando hay un conflicto entre lo que queremos que suceda y lo que realmente sucede.
La función de la frustración es hacernos entender que necesitamos enfrentar nuestros problemas de frente en lugar de sentarnos y simplemente esperar que funcionen.
Cuando las cosas no suceden de la manera que tú deseas que ocurran repetidamente, la frustración puede volverse extrema. Puede llevarte a actuar irracionalmente.
Cuando te concentras demasiado en sentirte frustrado, la verdadera razón puede verse nublada por otra emoción negativa: la ira.
A continuación te dejamos algunos consejos esenciales que te ayudarán a cultivar una actitud positiva para enfrentar la frustración.
Objetividad
Debido a que la frustración puede volverse bastante intensa, tendemos a sobre-estresarnos.
Por lo que, para evaluar la situación real, te recomendamos, intentar dar un paso atrás y volver a mirar la situación con una perspectiva más amplia.
Trata de usar la razón para juzgar las circunstancias sopesando lo positivo y lo negativo. Piensa en otras situaciones inmanejables con las que hayas tenido que lidiar en el pasado.
También puedes recurrir al recuerdo de situaciones pasadas que fueron peores de lo que está pasando en este momento.
Las afirmaciones positivas reforzarán tu espíritu y te ayudarán a percibir la situación desde un ángulo más manejable.
Siente la frustración
Reconocer tus emociones intensas, significa que las experimentas por completo. Una vez que las haces conscientes y las aceptas las podrás dejar ir.
Una cosa extraña sobre la naturaleza humana es que cuanto más intentas evitar enfrentar las emociones negativas, más fuertes se volverán.
La práctica de la atención plena te permitirá cultivar la inteligencia emocional. Esto fortalecerá tu capacidad de soportar. De esta manera, estarás mejor equipado para amortiguar el efecto de las emociones negativas.
Tiempo fuera para calmarse
La frustración puede volverse autodestructiva.
Debido a que te sientes con derecho a lo que crees que necesitas, cuando no puedes tenerlo, sientes el dolor. Esto puede llevar a pensamientos de venganza.
Sin embargo, hay emociones más poderosas para contrarrestar éste sentimiento. Mantener la calma es una de ellas. Estar en calma es una emoción positiva que puede evitar que la frustración se arraigue en tu mente.
Tómate un tiempo para calmarte. Luego, toma medidas prácticas para manejar la situación. Reflexiona sobre si hay razones subyacentes que contribuyen a que experimentes éstos sentimientos.
Quizás descubras algunos elementos que has estado manejando mal y que puedes intentar rectificar, lo que puede conducir a una resolución de la situación.
A menudo tienes grandes expectativas de lo que crees que debería suceder. Confundes lo que quieres con lo que realmente necesitas.
Hacer una distinción clara entre estas cosas te ayudará a quitar carga. A veces sientes la necesidad de impresionar a las personas, y lo haces a costa de ti mismo.
Sé sincero acerca de cuánto puedes dar a los demás sin disminuir tu valor.
Contemplación
Cuando te encuentres en una situación en la que no quieras estar, no dejes que te afecte. Recuerda, no hay prisa, el tiempo está de tu lado.
Si dejas que la frustración tome ventaja, es muy posible que te encuentres en una situación peor. Una vez que puedas calmarte por completo, te darás cuenta de que tienes otras opciones posibles.
Entonces descubrirás que puedes sopesar la situación racionalmente y te darás cuenta de que estar demasiado frustrado simplemente no vale la pena.
“La madurez es la capacidad de pensar, hablar y actuar dentro de los límites de la dignidad. La medida de tu madurez es cuán espiritual te vuelves en medio de tus frustraciones”. Samuel Ullman.