El modismo popular chino «Donde el agua fluye, se forma un canal», básicamente transmite la idea de que el éxito vendrá de forma natural cuando se cumplan las condiciones necesarias para dicho éxito.
Hay una historia interesante detrás de cómo se originó este dicho. Te invitamos a conocerla.
La historia detrás del dicho
Durante la Dinastía Song (960-1279), vivió un hombre llamado Su Shi que a menudo es considerado uno de los políticos, escritores y poetas más influyente de su tiempo. La expresión debe su origen a una carta escrita por Su Shi a su amigo, en la que revelaba cómo planeaba superar una lucha financiera durante un periodo específico en el que no tenía ingresos, pero sí una gran familia que alimentar.
Su Shi decidió que usaría 4.500 unidades de moneda cada mes. Dividió el total en 30 partes de 150 unidades monetarias. Cada parte fue envuelta y colgada de las vigas de su casa. Cada mañana, Su Shi usaba una horquilla para bajar una parte de la moneda. Entonces, un integrante de la familia escondía el tridente para que Su Shi no pudiera tomar más dinero para el día.
El dinero que quedaba después de cubrir los gastos diarios, se ponía como ahorro en un grueso tubo de bambú. Se usaba para atender emergencias o para entretener a los invitados. Siguiendo esta práctica, Su Shi calculó que sus ahorros le durarían un año entero, antes de lo cual esperaba que se abrieran otras fuentes de ingresos.
«Donde el agua fluye, se forma un canal, por lo que no hay que preocuparse hasta entonces. Por eso no tengo ninguna preocupación en mi corazón»,
escribió en la carta (Antiguo Chengyu).
En China, la gente todavía usa el dicho cuando trata de aconsejar a alguien que espere hasta que las condiciones estén maduras para poder alcanzar sus objetivos. La expresión también lleva consigo el mensaje de que no hay que preocuparse innecesariamente por tratar de forzar un resultado.
La vida de Su Shi
La Dinastía Song, durante la cual vivió Su Shi, fue una fase significativa en la civilización china. La población estaba en crecimiento, los niveles de educación aumentaban y los logros artísticos estaban en su apogeo.
Nacido en 1037, Su Shi tenía 19 años cuando aprobó los exámenes de la administración pública y pronto se convirtió en una estrella en ascenso dentro de la administración.
En 1079, Su Shi fue arrestado porque se había burlado del movimiento reformista que era muy influyente en la corte. Un año más tarde, se exilió y terminó viviendo en la pobreza. Fue durante este período que Su Shi creó algunos de sus versos más famosos. También era un pintor muy talentoso.
«Las obras de arte que creó eran diferentes a las de los artesanos o pintores profesionales de la Academia Imperial. La planta de bambú y las rocas, pintadas con pinceladas que se tuercen y giran, dan un verdadero aire de elegancia y gracia. Las líneas pueden parecer sencillas y, sin embargo, son increíblemente variadas y expresivas»,
dijo Kim Yu, Especialista Principal Internacional de Christie’s en Pintura China, en un comunicado (Christie’s).
En 1086, fue llamado de nuevo a la administración. Sin embargo, Su Shi fue desterrado una vez más en 1094. Seis años más tarde, en 1100, se le concedió un indulto y fue enviado a Changzhou.
Al año siguiente, Su Shi falleció. En la China moderna, Su Shi está considerado como uno de los ocho grandes maestros de la prosa, de los periodos Song y Tang.