
Por Troy Oakes —
¿Qué harías si estuvieras en el espacio y uno de tus colegas se volviese loco y tratase de matarlos a todos a bordo?
La NASA en realidad tiene un protocolo para sus astronautas en caso de que alguno la emprendiese contra sus compañeros.
La NASA tiene procedimientos que detallan cómo lidiar con un astronauta suicida o psicótico en el espacio. Los documentos fueron obtenidos por la Associated Press y dicen: «los compañeros de tripulación del astronauta fuera de control deben juntar sus muñecas y tobillos con cinta adhesiva, atarlo con una cuerda elástica e inyectarle tranquilizantes si fuese necesario».
«Hablen con el paciente mientras lo están restringiendo», las instrucciones también dicen: «Explique lo que está haciendo y que usted está inmovilizándolo por seguridad.»
Las instrucciones no explican lo que pasa después de eso. Pero el portavoz de la NASA James Hartsfield dijo que un cirujano en tierra y el comandante en el espacio decidirían si abortar el vuelo, en el caso de encontrarse en el transbordador, o enviar a casa al astronauta, si el episodio hubiese ocurrido en la Estación Espacial Internacional (ISS), escribió CBS News.
CBS siguió escribiendo que los miembros de la tripulación tendrían que depender en gran parte de la fuerza bruta para someter al astronauta desquiciado, ya que no hay armas en la estación espacial ni en el transbordador. Una pistola abordo está fuera de discusión; una bala podría perforar la nave espacial ocasionando la muerte a todos. No hay pistolas paralizantes a mano tampoco.
Según Hartsfield
La NASA ha determinado que no hay necesidad de armas en la estación espacial.
Los equipos médicos de la estación espacial, disponen de antidepresivos, ansiolíticos y antipsicóticos.
La lista de verificación también dice que los astronautas pueden ser restringidos y luego se les puede ofrecer Haloperidol oral, que es un medicamento antipsicótico. Si el astronauta se niega a cooperar, los medicamentos pueden ser suministrados por la fuerza. Algunos miembros de la tripulación se turnarán para vigilar al astronauta trastornado monitoreando sus signos vitales.
Según CBS, los astronautas de la ISS hablan semanalmente a larga distancia con un cirujano de vuelo y cada dos semanas con un psicólogo, por lo que cualquier trastorno psiquiátrico probablemente sería detectado antes de que llegase a ser tan grave que el astronauta tuviese que ser devuelto a casa, declaró Hartsfield.
Bueno, al menos ya se ha pensado en ello. Nunca se ha reportado que haya sucedido, pero eso no quiere decir que nunca ocurrirá.