Le guste o no al mundo, el Sistema de Crédito Social (SCS) de China está dejando rápidamente su impacto.
No solo en el territorio chino, sino también en todo el mundo, afectando las políticas de las empresas internacionales.
Las empresas de todo el mundo puedan terminar siendo tan influenciadas por el SCS que comenzarán a actuar exactamente como el partido comunista chino quiere.
El riesgo es real.
El sistema de crédito social
Beijing introdujo el Sistema de Crédito Social para administrar a sus ciudadanos teniendo en cuenta múltiples factores como el ingreso, la deuda, el comportamiento, la situación legal, etc.
Los ciudadanos son clasificados para determinar quiénes son elegibles para los beneficios ofrecidos por la sociedad china y en qué magnitud deben ser asignados, ese es el objetivo.
El Sistema de Crédito Social se aplica a todo, desde préstamos, atención médica, admisiones universitarias, citas y más.
Cuanto más alto sea su puntaje, mayores serán los beneficios que recibirá.
Por ejemplo, algunos hospitales permiten a personas con un buen puntaje de crédito social evitar tener que esperar en la fila y visitar al médico tan pronto como llegan.
Las personas con buenas calificaciones también pueden alquilar autos sin tener que pagar un depósito.
Cuando se trata de citas, varias aplicaciones chinas permiten a los hombres con buena puntuación tener más visibilidad, lo que aumenta sus posibilidades de obtener una cita y una posible compañera de vida.
Su puntaje puede verse afectado si no paga a tiempo su factura de electricidad, no cumple con los pagos de sus deudas, participa en actividades ilegales, publica en línea reseñas de productos falsos, etc.
Una vez que su puntaje haya bajado, tendrá que trabajar muy duro para recuperarlo.
Las personas con bajo CS serán castigada; pagando tasas de interés más altas en préstamos y depósitos más grandes al momento de alquilar y obtendrá una menor visibilidad en aplicaciones de citas, etc.
Quienes se encuentren involucrados en ideologías consideradas en contra del Partido Comunista también se les reducirá la puntuación.
Lanzado en 2014, se espera que para el año 2020 el Sistema de Crédito Social se implemente en todo el país.
Pero no sólo los ciudadanos, sino también las empresas están bajo el alcance del SCS.
No está limitado sólo a China
Aunque se piensa que el Sistema de Crédito Social se implementará solo para controlar a los ciudadanos chinos.
Un examen más detenido revela el peligro de que pronto pueda abarcar todo el mundo.
Transformando la opinión global para alinearla a las opiniones del Partido Comunista Chino.
Esto se debe a que el SCS es aplicable incluso a las compañías internacionales que operan en China.
Un informe advierte:
“A medida que las empresas continúan cumpliendo [con el Sistema de Crédito Social], la aceptación de las afirmaciones del PCCh eventualmente se convertirá en una decisión automática y, por lo tanto, en una norma que interfiere con la soberanía de otras naciones.
Para el público que se encuentran en el extremo receptor de tales cambios, la narrativa del PCCh se convierte en la «verdad» dominante y los puntos de vista y evidencia alternativos, son marginados.
Este control narrativo afecta a individuos en China, empresas chinas e internacionales, otros estados y sus ciudadanos».
Algunas aerolíneas de los Estados Unidos y Australia, para mantener su puntaje alto y a Beijing feliz; han dejado de mencionar a Taiwán en los sitios web y de esta forma poder continuar operando de manera rentable en China.
Estos son algunos de los cambios provocados por este nuevo sistema.
Entregar el control al gobierno y dejar que ejerza influencia en la vida personal; ha sido un principio central del sistema socialista.
Una por una; las políticas asegurarán que el individuo pierda el control sobre sus derechos y los entregue, a las personas en el poder.
Este peligroso precedente debe ser evitado desde el inicio.
¿QUIEN CONTROLA A LOS POLÍTICOS Y MILITARES CHINOS?, NO HAY EQUIDAD.
Hola Reina, muchas gracias por dejarnos tu comentario, ciertamente es muy difícil que haya un control cuando son quienes ejercen el poder a los que habría que vigilar, el hecho de ser una gran potencia económica también influye mucho en la carencia de control.