Por Silvia Gleizer
Como introducción preliminar y para estar en la misma sintonía (página), cuando hablo de Orientación a resultados me refiero al término que usamos para describir a una persona u organización que se centra más en el resultado que en el proceso transitado.
En este caso pensé en las personas…
¿Cuándo nos volvimos máquinas de conseguir resultados?
Y… ¿Qué somos capaces de hacer para obtenerlos?.
La gente siempre dice que si uno necesita ayuda debe buscarla…
“Si necesitas ayuda debes buscarla”
No me voy a poner filosófica, saque este tema, en realidad, porque en un momento de mi vida donde las cosas se estaban tambaleando, por varios lados, intente buscar apoyo…
Pero lo que recibí fueron directivas o instrucciones: “Haz esto, prueba aquello», y la verdad es que no era lo que quería o lo que estaba necesitando.
Muchas veces la gente intenta ayudar pero creen que la ayuda viene de decirte cómo hacer las cosas y eso me llevó a pensar: “Parece que intentan conseguir resultados”
- Te sentís mal, sentite bien;
- Tenés un problema prueba solucionarlo de tal o cual manera
- No te alcanza, generá más,
- etc…
Tener un oído amigo
A veces cuando uno no se encuentra bien o está pasando por pruebas, lo único que necesita es un oído amigo, un…
“¿cómo (estas) te sientes?”
Algo más empático, llamémoslo “el abrazo, el silencio cómplice o la palmadita en la espalda”.
Proceso, acción, reacción… y creo que perdimos de vista algo importante… en esta búsqueda desmedida de resultados.
Y esto se convirtió en un tema actual y recurrente ¿no?, tenemos que conseguir resultados:
“si algo está mal, tiene que estar bien”…
Aprendiendo del camino
Conseguir resultados es importante, nadie lo pone en duda, ir hacia un objetivo, pero también existe otra parte: “aprender del camino”.
Incluso cuando uno «la está pasando mal», transitar el camino y tener a alguien que simplemente nos diga : “No puedo hacer nada por vos pero acá estoy, cuenta conmigo, entiendo que es tu camino y te veo atravesándolo”, ya es más que suficiente.
En algún punto perdimos de vista a la persona, a tener en cuenta qué tipo de ayuda necesita realmente, a veces hace falta una indicación pero otras, nuestro papel es más sutil y más difícil de hacer.
En este caso es mostrarle al otro que no siempre tenemos una respuesta, pero sí tenemos interés y preocupación por lo que le pase.
Cada uno de nosotros está transitando su propio proceso de vida, y ningún consejo, solución o manera de ver las cosas es universal o absoluta.
“Estar” no significa solucionar, o dar respuestas, estar es: “te aprecio y te acompaño en los que sea que estés pasando, cuenta conmigo”.
“El camino marca una dirección y una dirección es más que un resultado”- Jorge Bucay
