Por Megan Ray Nichols
A lo largo de la historia, la infraestructura de los Estados Unidos ha mantenido la economía estadounidense ayudando a sus familias, comunidades y empresas.
Esta infraestructura del país abarca: las tuberías de agua, líneas eléctricas, alcantarillas y calles de la ciudad. Algunos de los más impresionantes símbolos y monumentos nacionales de Estados Unidos son la presa Hoover, el sistema nacional de carreteras, y el puente Golden Gate de San Francisco.
Sin embargo, recientemente, esta impresionante infraestructura de los Estados Unidos se ha estancado en su crecimiento y desarrollo, ha comenzado a desmoronarse en sus cimientos, con una red de energía sobrecargada, puentes peligrosamente débiles, alcantarillas en mal estado, fugas de agua en sus tuberías, presas ineficientes, y pobres instalaciones educativas.
En contraste otras infraestructuras florecen. Las 27 naciones de la Unión Europea (UE) quien genera la quinta parte del producto interno bruto mundial (PIB). La UE ha hecho el tránsito transfronterizo transparente con su unión: caminos de peaje, el espacio aéreo, y las líneas de ferrocarril son más fáciles de acceder y navegar. Su sistema de educación también ha producido poblaciones más cualificadas.
Al mismo tiempo, China ha comenzado a intercambiar más con la UE para construir nuevos proyectos de infraestructura como ferrocarriles de alta velocidad con la finalidad de impulsar el comercio, y por la relación geográfica que comparten. Por su parte los EE.UU., separado por los océanos más grandes del mundo, se queda en desventaja sin una infraestructura fuerte.
Espacio aéreo congestionado
Si hace negocios en una escala nacional o internacional, un sistema de aviación eficiente es de vital importancia. El número de personas que viajan en avión en los EE.UU. solamente está aumentando, incluso después de la reciente recesión económica.
A pesar de esta necesidad, el tráfico aéreo se ha estirado hasta el límite. La congestión y retrasos le costaron a la economía de los Estados Unidos casi $ 22 mil millones de dólares en el 2012, según las estimaciones de la Administración Federal de Aviación (FAA).
Esos números sólo han empeorado, mientras que para China esto ha mejorado: China está construyendo actualmente la mayor terminal aérea del mundo.
Ferrocarriles ineficientes
Los ferrocarriles de los Estados Unidos son una de sus opciones con mayor eficiencia energética para el transporte tanto de mercancías como de pasajeros que van de ciudad en ciudad. En 2012, Amtrak registró un alto número de usuarios con 31.2 millones de pasajeros – aproximadamente el doble de la cantidad que habían experimentado una década antes.
Estados Unidos ha aumentado su flota con nuevos trenes y grandes inversiones en sus vías de ferrocarril, puentes y túneles. Sin embargo, todavía esta al margen comparado con China, ya que cuentan con la más larga ruta de ferrocarril de alta velocidad del mundo.
Lo mismo es con Europa, quienes tienen al menos 16 trenes de alta velocidad, incluidos algunos de los más rápidos del mundo. Los EE.UU., por su parte, mantiene todavía el estatus como el único país desarrollado sin un ferrocarril de alta velocidad.
Carreteras en mal estado
Las carreteras son uno de los mejores y más importantes logros económicos nacionales de E.U. y son los más antiguos de América. La primera carretera interestatal de Estados Unidos se completó bajo la dirección del primer presidente y fundador, el general George Washington.
George Washington creía que la carretera nacional haría que los Estados Unidos fueran más fuertes, ricos y más seguros al crear una transición sin obstáculos para el comercio de este país, sus carreteras continuaron evolucionando y crecieron bajo el mandato del presidente Dwight D. Eisenhower.
Recientemente, China ha imitado el gran sistema de carreteras estadounidense con el Sistema Nacional Troncal, construido para ser el más grande y más rápido en su género. Al día de hoy en los E.U. no se ha invertido en este tipo de infraestructura.
Reducción de los puertos marítimos
De acuerdo con estimaciones del Ejército de los E.U., más del 95 por ciento del comercio exterior de Estados Unidos se mueve a través de sus puertos marítimos.
Debido a esto, es necesario que se invierta en su manutención y calidad, pero los fondos federales son bajos. Por su parte la UE, ha logrado conectar los puertos de sus países miembros, permitiendo con ello un comercio más eficiente y abierto.
Estados Unidos tiene una gran cantidad de trabajo por hacer. Las principales mejoras deben hacerse a través de sus sistemas de infraestructura nacional e internacional con el fin de que estos sean viables y competitivos en una economía global. Si se invierte de forma rápida y sabiamente, Estados Unidos puede volver a ser un jugador importante en el mercado mundial.
Este artículo fue elaborado por Megan Ray Nichols.
