El brote de Covid-19 ha hecho que cada persona sea consciente de lo que significa estar cerca el uno del otro. Mantener la distancia social ahora es fundamental para salvar al mundo de esta pandemia viral.
Sin embargo, el distanciamiento social podría ser una buena práctica para los adultos, pero:
¿Qué pasa con los millones de niños que están en su fase de crecimiento? ¿La falta de interacción social no afectará su desarrollo psicológico e intelectual?
Aislar a los niños
En mayo, un par de imágenes se hicieron virales en Facebook.
Una de ellas mostraba a los niños manteniendo un gran espacio entre ellos, al permanecer dentro de cuadrados dibujados en el suelo.
Otra imagen mostraba a niños en compañía de cuidadores de jardín de infantes, que usaban máscaras faciales e incluso un protector facial.
Las imágenes provocaron un fuerte debate sobre cómo ahora se les niega a los niños el consuelo del tacto y de la cercanía.
“Esto es más que triste. Hace que los niños pequeños se paren en cajas, negandoles el derecho a jugar con sus compañeros. Cuidadores enmascarados que hacen imposible expresar sus emociones.
¿Quizás es más seguro para la salud física, pero a qué costo para su desarrollo social y salud mental? Esto realmente me angustia y me enojado verlo.
Es una configuración increíblemente cruel y es mejor para el jardín de infantes permanecer cerrado y admitir que no es posible cuidar de manera segura a los niños, de una manera que satisfaga sus necesidades emocionales, que tratarlos de esta manera»,
comentó un usuario de Twitter en una serie de tweets @LASwiftClassics.
El Dr. David Whitbread, psicólogo cognitivo del desarrollo y especialista en primeros años, señala que poner a los niños en una situación en la que puedan ver a sus compañeros y maestros, pero se les prohíba acercarse a ellos, puede generar impresiones negativas en sus mentes.
En cambio, mantener a los niños en casa donde al menos puedan divertirse con sus padres y hermanos, es la mejor opción.
Advierte que cuanto más tiempo los niños se vean obligados a seguir las reglas de distanciamiento social, especialmente aquellos de hogares perturbados, más profundamente afectará su salud mental.

Cameron Caswell, psicóloga del desarrollo y consejera familiar, cree que los efectos del aislamiento impuesto a largo plazo serán más significativos entre los adolescentes.
Ella argumenta que la adolescencia es un período en el que nuestros cerebros pasan por uno de los mayores brotes de crecimiento.
Este es el momento en que comenzamos a desarrollar nuestras habilidades, creencias, sistemas de valores, etc., que influyen en el resto de nuestras vidas.
Caswell advierte que si las experiencias de los adolescentes se atrofian durante este período crucial, se verá frustrada su oportunidad de crecer al máximo potencial.
Consejos para la cuarentena del coronavirus
Si tienes hijos en casa, debes asegurarte de que nunca se sientan aislados. Asegúrate de jugar algunos juegos con ellos todos los días. Los ejercicios físicos deben ser alentados.
No dejes que pasen todo el día sentados en el sofá viendo la televisión. Ahora, si pasan tiempo chateando en línea con sus compañeros, déjalos en paz.
Separarlos de sus amigos en Facebook o Twitter es una de las peores cosas que puedes hacer durante la cuarentena, especialmente si tu hijo es un adolescente que no es particularmente aficionado al hogar.

Recuerda ser paciente mientras tratas con niños durante la cuarentena. Ten en cuenta que estar aislado afecta enormemente las mentes de los niños y pueden terminar reaccionando agresivamente.
Como padre, es tu trabajo mantenerlos tranquilos y disciplinados. Ten cuidado con los signos de depresión y consulta a un especialista en niños en caso de que creas que tu hijo este estresado.