Casos insólitos: Anciano coreano aprendió Chino “mágicamente”

Por: HongMei, The Epoch Times

 

«Desde los seis años de edad, Confucio y Mencio aparecían en mis sueños,  quienes  se turnaban para enseñarme las obras clásicas chinas y confucianas. Ellos me castigaban físicamente cuando no aprendía bien y a  la mañana siguiente encontraba dolorosos moretones» A los  93 años, este  coreano revela el viaje místico que le llevó a aprender chino.

Los sabios que enseñaron chino en sus sueños

Los estudiosos confucianos de Corea suelen tener un seudónimo chino para identificarse. Wen Xianggao, alias Liang Baitang, era muy pobre de niño. Él no fue a ninguna escuela para aprender chino. Sin embargo, tenía a Confucio y a Mencio, quienes mágicamente le enseñaban chino en sus sueños.

El señor Liang reveló que además de  Confucio y Mencio, en sus sueños también aparecían dos famosos confucianos coreanos, Li Huang y Li Er, quienes le enseñaban chino.

«Cuando era niño le dije a la gente del pueblo que aprendía chino en mis sueños, pero ellos pensaban que mentía o que era mentalmente inestable». Así que prefirió guardar su aprendizaje en secreto.

Un campeón de la poesía china

El señor Liang nunca tuvo una educación formal. Sin embargo a la edad de 26 años enseñaba chino en el Instituto Confuciano Sungkyunkwan, el cual goza de la mayor reputación en Corea.

Ahora a sus  93 años de edad, el Señor Liang  sigue enseñando chino en su casa. Asegura haber tenido más de un millar de estudiantes, entre ellos al ex presidente coreano Park Chung-Hee.

Certificados honoríficos en chino y coreano del Sr. Liang. (The Epoch Times).
Certificados honoríficos en chino y coreano del Sr. Liang. (The Epoch Times).

Debido a que era el campeón invicto todos los años en los concursos de poesía china, los organizadores tomaron la decisión de crear un premio especial para él en el concurso, así podrían  darle la oportunidad a nuevos talentos de convertirse en campeones.

El señor Liang contó acerca de un sueño la noche antes de un concurso de poesía china, en el cual  le fueron revelados las normas y estilos que iban a preguntar en el certamen. Al día siguiente, cuando todo el mundo estaba concentrado en cómo completar la poesía,  él entregó su hoja de respuestas antes de tiempo.

El presentador de la televisión coreana MBC le preguntó: «Los otros todavía están sufriendo, ¿cómo has acabado tan rápido?» él dijo la verdad, pero pensaron que el señor Liang estaba bromeando.

Más tarde, entrevistaron al Sr. Liang en su casa y le preguntaron cómo aprendió chino. El Señor Liang contestó: «Lo aprendí de mi madre». Ya no le explicó a la gente que aprendió chino en sus sueños porque nadie le creía.

Memoria fotográfica y  Audición divina

Liang Haciendo poesía china. (The Epoch Times)
Liang Haciendo poesía china. (The Epoch Times)

El Señor Liang Baitang no sólo aprendió los caracteres chinos en sus sueños, sino también todas las lecciones del idioma chino. Él asegura  tener una memoria fotográfica. El recita un libro grueso en su totalidad, sin ningún error.

Una vez, viajó a una ciudad con otros profesores del idioma chino en un coche. Debido a que no había libros para leer, recitó durante seis horas los libros de Confucio para todos. Estos profesores quedaron tan asombrados por su conocimiento que ya no se atrevieron a presumir delante de él otra vez.

«Algunas personas se mostraron escépticos de mi memoria y por ello, llevaron a cabo un experimento. Me solicitaron recitar el libro Comprehensive Mirror y lo compararon con el texto original. Encontraron diferencias en algunas partes del texto. Sin embargo, dichas inconsistencias, resultaron ser errores de impresión”.

Con el fin de demostrar su capacidad, el Sr. Liang tomó un antiguo libro chino y comenzó a recitarlo. The Epoch Times encontró que el señor Liang no se equivocó en ninguna palabra.

El señor Liang dijo a los periodistas que  además tiene una audición divina. Cada vez que lee una palabra desconocida, dicha voz le dice su significado.

Este fenómeno también apareció durante la entrevista. Cuando él no recuerda algo, la voz en su oído se lo indica en el momento adecuado. 

Un extraordinario estado de ánimo

Sr. Liang reverenciando a Confucio. (The Epoch Times)
Sr. Liang reverenciando a Confucio. (The Epoch Times)

Durante la entrevista, el Sr. Liang mencionó algunos detalles de  su vida para validar su extraordinario estado mental detrás de estos milagros.

Cuando era más joven, alguien perdió una cartera en una fiesta, pero nadie admitió tomarlo. Cuando el Sr. Liang fue interrogado, admitió que había robado el dinero y luego lo devolvió

Los asistentes de  la fiesta sabían que él era una buena persona y que no podía haber hecho algo así. Pero la razón del Sr. Liang fue evitar que la fiesta se arruinara por el desafortunado incidente que ocasionó el sufrimiento de los asistentes. Más tarde, el verdadero culpable fue capturado y confesó el crimen. La verdad finalmente salió a la luz.

Durante la Guerra de Corea, un oficial del ejército Norcoreano quiso asesinar al Señor Liang, pero fracasó en el intento. Más tarde, el oficial se entregó a los surcoreanos debido a que su familia vivía en ese país. Un día, la hija de este oficial requirió ayuda médica y éste la llevó al hospital.

Para ese entonces, el señor Liang trabajaba en el hospital. Él reconoció al oficial, pero no sintió odio, por el contrario, le brindó atención a la hija del hombre, preparando el tratamiento y la medicina para curar la enfermedad  persistente que la agobiaba.

Desde ese momento, el señor Liang  ayudó al oficial cada vez que estaba en problemas. Al final, se convirtió en el testigo  en la ceremonia de matrimonio de la hija.

El Señor. Liang dijo:

«Pagar el mal con bondad  le recuerda a la otra parte lo que hizo mal, ¿cómo podría él hacerle  algo malo a alguien tan agradable? De esta forma la otra parte cambia su corazón. Eso es ser un verdadero caballero».

Él  reveló que la única vez que ha estado realmente enfadado en su vida fue durante la Guerra de Corea, cuando los norcoreanos invadieron Corea del Sur y los comunistas de Corea del Norte robaron a su padre los ahorros de toda la vida.

La lectura diaria de las enseñanzas de Confucio y el cultivo de su corazón

El Señor Liang es muy piadoso. Venera a los seres divinos y los sabios. Lleva ropa coreana formal y se postra todos los días ante Confucio y los dioses del Cielo y de la Tierra.

Él ama los libros. Pasa la mayor parte de su tiempo leyendo y disfruta de las lecturas  que le aportan  buenas ideas o buenas oraciones; luego las escribe y memoriza.

«Yo leo principalmente escrituras confucianas. A menudo me emociono después de leerlas. Me pregunto por qué a pesar de que todo lo escrito en estos  libros es verdad, no puedo actuar en consecuencia. ¿Por qué con frecuencia cometo tantos errores? Quiero ser un seguidor de Confucio y quiero cultivar mi corazón. Tengo que recordarme a mí mismo que debo hacerlo con fidelidad».

 * Este escrito es para alguien que es de confianza y con gran integridad moral. Traducido por NatasheYang

Fuente del articulo: http://mag.epochtimes.com/b5/305/11494.htm

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