9 consejos para lograr el equilibrio entre el trabajo y la vida privada

Por Haidene Go

Muchos de nosotros hemos vivido situaciones en las que sentimos que el trabajo ha empezado a sobrepasarnos o es demasiado. Por eso, en tiempos difíciles como los actuales, en los que muchas personas se están adaptando a nuevas formas de trabajo, puede ser aún más importante establecer unos límites laborales saludables.

Examinar las cosas en términos de equilibrio entre el trabajo y la vida, es decir, cómo se distribuye el tiempo y la energía en los distintos aspectos de la vida, puede ser beneficioso.

Renuncia silenciosa para lograr el equilibrio entre la vida laboral y la personal

Años de largas jornadas de trabajo, empresas con poco personal y empleados quemados han dado lugar a la última tendencia: el «quiet quit» (renuncia silenciosa). El eslogan «quiet quitting» (renuncia silenciosa) es engañoso, ya que hace que algunas personas puedan pensar que los trabajadores hacen lo mínimo en su trabajo.

En cambio, se trata de dejar de hacer un trabajo que la gente siente que está más allá de lo que se le contrató para hacer y no se le compensan. Los empleados siguen destacando en su trabajo, pero no hacen horas extras.

Para conseguirlo, los empleados deben mantener un equilibrio entre la vida laboral y la personal

El balance entre el trabajo y vida privada es un estado de equilibrio en el que se priorizan por igual las exigencias de la carrera y las necesidades de la vida personal. Se trata de tener la flexibilidad necesaria para hacer las cosas en la vida profesional y al mismo tiempo tener tiempo y energía para disfrutar de la vida personal.

Las causas más comunes de un mal equilibrio entre la vida laboral y personal son trabajar horas extras, aumentar las responsabilidades laborales, tener hijos o vivir solo.

Un equilibrio adecuado entre la vida laboral y personal te permite entenderte a ti mismo, tu necesidad de trabajo y tu deseo de disfrutar. (Imagen: Tinnakorn Jorruang vía Dreamstime)

Cómo conciliar la vida laboral y familiar

Equilibrar tu vida personal y laboral puede ser difícil, pero es necesario. A continuación, te explicamos cómo puedes empezar hoy mismo a mejorar el equilibrio entre tu vida laboral y personal.

1. Establece prioridades

¿Cómo decides lo que es más importante en tu vida, tanto personal como profesionalmente? ¿Qué hay que hacer para establecer prioridades?

En primer lugar, entiéndete a ti mismo, tu necesidad de trabajo y tu deseo de disfrutar. A continuación, decide las cosas que son importantes para ti, toma el tiempo necesario.

Luego, para priorizarlas, aprende a separar las obligaciones personales de las profesionales. Por último, haz listas de tareas separadas para cada una de ellas, programa el tiempo y sé realista.

2. Gestión del tiempo

Comienza a planificar tu día en lugar de limitarte a completar las actividades a medida que surgen o a saltar de una actividad a otra. Trabaja ahora de forma más inteligente, no más complicada. Determina qué tareas puede asignar a otros para priorizar las actividades de mayor valor.

Será más sencillo enfocarse, tachar cosas de la lista y alcanzar tus objetivos si estableces hitos claros y eres más conciente sobre la forma en que empleas tu tiempo.

3. Establece límites

Establece límites personales que te permitan dedicarte a tus actividades de ocio para divertirse plenamente. Hazlo, aunque signifique vaciar tu bandeja de entrada de correos electrónicos u ocultar tu calendario los fines de semana y las noches.

Te cuesta salir de tu «oficina» virtual porque estás acostumbrado a estar «siempre conectado». Establece un ritual, como caminar o hacer ejercicios, lo que te funcione.

4. Define normas coherentes

Ten unas pautas estándar que seguir una vez que hayas establecido las prioridades de tu vida. La autodisciplina suele ser algo positivo. Nadie promete que alcanzar los objetivos vaya a ser sencillo, pero si tienes la suficiente dedicación, encontrarás la manera de conseguirlo. Establece la regla de que dejarás el trabajo en el trabajo y no pensarás en tu trabajo en casa.

5. Haz una tarea a la vez

Considera la posibilidad de convertirte en un monitoreador en serie en lugar de realizar una tarea a la vez tratando de hacer malabares con un millón de cosas simultáneamente. En un momento dado, presta atención a una sola cosa. Así podrás concentrarte por completo en algo y completarlo con rapidez y eficacia. Además, lentamente realizarás más trabajos y con menor atención a los detalles.

Dedica tiempo a las cosas que son importantes para ti. (Imagen: Hongqi Zhang vía Dreamstime)

6. Establece un calendario de trabajo adecuado

Puedes estar seguro de que tu plan será caótico si pierdes el control de tus límites. Por eso es tan importante establecer unos límites adecuados.

Seleccionar el horario de trabajo adecuado es una cosa que puedes hacer para evitar preocuparte por los asuntos pendientes en casa.

7. Mantente organízado

Uno de los métodos más prácticos para garantizar el equilibrio entre el trabajo y la vida privada es utilizar herramientas para mantener las cosas bajo control.

Para mantener las cosas bajo control en el trabajo, puedes utilizar un software de gestión de proyectos que te ayude a gestionar tu carga de trabajo llevando un control del tiempo, manteniendo listas de cosas que hay que realizar, estableciendo prioridades, etc. Podrás mantener el estrés del trabajo fuera de tu vida personal.

8. Tómate un tiempo libre

Estar deprimido afectará a tu trabajo y te impedirá tener éxito. Aunque las exigencias de tu trabajo te mantengan constantemente ocupado, las vacaciones son necesarias.

Una pausa en el trabajo te dará una oportunidad estupenda para reponer fuerzas y rejuvenecer, aunque sólo sea un día. Te ayudará a mantener un equilibrio saludable entre la vida laboral y personal y a aumentar tu concentración cuando vuelvas a la oficina.

9. Trabajar más inteligentemente, no más duro

A muchos empleados se les dice que trabajen horas extra porque eso puede aumentar la productividad. Pero esto socava gravemente la capacidad de equilibrar el trabajo y la vida, lo que, en consecuencia, provoca efectos adversos en el rendimiento de los empleados.

La verdad es que un mayor número de horas de trabajo no se traduce en una mayor productividad. Por el contrario, trabajar un horario regular te permite maximizar adecuadamente tu tiempo en el trabajo y dedicar algunas partes del día a las cosas que te gustan y disfrutas.

Una vida personal satisfactoria puede coexistir con una carrera laboral fructífera

La vida puede parecer un acto de malabarismo interminable, pero si te resulta difícil encontrar el equilibrio entre el trabajo y la vida, debes hacer una pausa, respirar y tener en cuenta tu salud y bienestar.

Recuerda siempre que tú eres lo primero. Un equilibrio saludable entre el trabajo y la vida requiere un esfuerzo dedicado, pero la recompensa de esta búsqueda será beneficiosa para mejorar la calidad de tu vida.

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