Por Raven Montmorency
Es triste pero cierto que nuestra sociedad, en estos últimos tiempos, ha llegado a aceptar ciertos tipos de comportamientos tóxicos como normales.
Tales comportamientos no deberían tener ningún lugar en una sociedad civilizada, sin embargo, la verdad es que la mayoría de las personas, incluida la sociedad «bien educada», simplemente no levantan la voz contra tales actos.
Como resultado, aquellos que se entregan a tales comportamientos tóxicos quedan impunes y la tendencia continúa, se manifiesta y sigue creciendo.
Comportamientos tóxicos que se están volviendo aceptables en la sociedad
1. Explosión de ira
La ira es un sentimiento destructivo y causa mucho más daño que beneficios. Lo triste es que en muchos niveles de la sociedad, los actos de ira que conducen a acciones violentas son apoyadas, directa o indirectamente.
A veces, esta ira se redirige a personas que no tienen nada que ver con el suceso desencadenante. Por ejempo, un hombre regañado por su jefe probablemente no puede devolverle el golpe, por lo que redirige esa ira, a su cónyuge o personas cercanas y de confianza.
2. Intimidación y apoyo
Los comportamientos tóxicos no se limitan a los adultos. En la escuela, algunos niños intimidan a otros. Si bien los maestros y los padres a veces intervienen para resolver tales incidentes, una sección de padres simplemente permanece «muda» ante ciertas situaciones, sin dase cuenta que probablemente sin la intervención adecuada, esto alienta a los niños que sigan con estos comportamientos erróneos, lo que conduce a problemas mayores a largo plazo.
3. Hacer cumplir los estereotipos de género
Para la mayoría de las personas, seguir los estereotipos de género y tratar de imponerlos a los demás es parte de la vida. De hecho, no piensan más allá del patrón. A menudo se les ve utilizando pretextos de la cultura y la sociedad para imponer tales estereotipos e ideas superficiales a los demás.
4. Agresividad
Para algunos hombres, exhibir poca amabilidad hacia los demás es considerado un rasgo masculino. Esto es, de hecho, una parte de lo que se llama «masculinidad tóxica».
A veces esta forma de manifestarse, llega a límites físicos. Algunas personas se complacen en mezclar agresividad en su comportamiento y palabras poco alentadoras mientras tratan con otros, incluso si no es necesario hacerlo.
5. Reprimir los sentimientos
A veces, las personas terminan reprimiendo sus sentimientos reales para aparentar ser fuertes, mezclando factores relacionados al ego.
Para el género masculino por ejemplo, no es inusual reprimir los sentimientos de debilidad e inseguridad. En las mujeres, por el contrario, la supresión de emociones y sentimientos suele verse con menor frecuencia
6. La arrogancia del intelecto o los logros
Es bastante común hoy en día ver a personas que usan sus logros para exhibir superioridad sobre los demás.
Muy pocas personas pueden mirar desde la perspectiva en donde los títulos y los puestos de trabajo que ocupamos es sólo una parte de la vida, y que no es lo que nos define como seres humanos.
Incluso algunas personas ponen su profesión adelante de su nombre a la hora de presentarse o de mostrar como quieren ser llamados. Ejemplo: – Soy la Doctora Patricia, o – Mucho gusto soy el licenciado Medina.
7.Orgullo de estereotipos (linaje)
También es común ver a ciertas personas enorgulleciéndose inmensamente de cosas que no adquirieron ellos mismo con su esfuerzo.
Por ejemplo, se puede ver a algunas mujeres y hombres haciendo discursos elevados sobre su linaje o cosas logradas por sus antepasados, etc, entregándose muchas veces a una actitud arrogante.
Conclusión
Ahora que conoces algunos comportamientos que no llevan a una buena comunicación y a la formación de un buen vínculo con los demás, te ayudarán a ser conciente, para mirarte a ti mismo y descubrir si en algunas ocasiones te comportas de esta manera, y a la vez, poder detectar estas actitudes en los demás, y poder crear relaciones más sanas y nutritivas para tu vida.