6 historias de iluminación

1. El tumor

Uno de mis amigos que es médico, me contó que una vez durante una operación para quitar un tumor canceroso a un paciente, después de abrir el área afectada, encontró que no podía cortar el cáncer así que nuevamente suturó al paciente.

Explicó la situación al paciente, pero él venía de un área rural y no podía entender la terminología; entonces pensó que la operación había terminado y que el cáncer se había curado.

Más tarde, el paciente fue dado de alta del hospital. Al hacerle una visita un año después, el paciente estaba en remisión total y se había recuperado completamente. Sus células cancerosas habían desaparecido.

Una sólida fuerza de voluntad y un humor optimista pueden superar las enfermedades, lo que puede hacer que las personas sean más fuertes y vivan más tiempo.

2. La bella de la clase

Cuando públicamente todas las chicas votaron para designar a la bella de la clase, una chica de aspecto medio llamada Xiaomei dio un discurso. Ella dijo:

«Si soy elegida, dentro de unos años todas podrán decirle con orgullo a sus maridos que cuando fueron a la universidad, ¡Ustedes eran más guapas que la bella de la clase!»

Como resultado, fue elegida por unanimidad.

No es necesario demostrar que eres mejor que los otros para persuadir a los demás a que te apoyen, sino que hacer que los demás sientan que gracias a ti, se vuelven mejores y más realizados.

No es necesario demostrar que eres mejor que los otros para persuadir a los demás a que te apoyen. (Photo 50638959 © Cherriesjd | Dreamstime.com)

3. ¡También puedes mentir!

En un banquete, Mark Twain se sentó junto a una dama y le dijo educadamente:

– «¡Eres muy hermosa!»

La dama no lo apreció y dijo con arrogancia:

– «¡Desgraciadamente, no puedo devolverte el cumplido!»

Mark Twain respondió eufemísticamente:

– «¡Está bien, tú también puedes mentir!»

Después de oír eso, la señora se puso roja de vergüenza. La piedra que dejas caer a propósito, siempre te hace tropezar.

4. Los tres hijos

En una familia con tres hijos, desde la infancia vivieron con los interminables sonidos de peleas entre los padres. A menudo, la madre era golpeada hasta quedar morada. El hijo mayor pensó:

– «¡Mamá es tan patética! Seré amable con mi esposa en el futuro».

El segundo hijo pensó:

– «Es tan aburrido casarse ¡no me casaré cuando crezca!»

El tercer hijo pensó:

– «¡Resulta que un marido puede golpear así a su mujer!»

Incluso si el entorno es el mismo, siempre que la forma de pensar sea diferente, habrá resultados diferentes para cada vida.

Incluso si el entorno es el mismo, siempre que la forma de pensar sea diferente, habrá resultados diferentes para cada vida. (Photo 8532548 © Pakwat69 | Dreamstime.com)

5. La cita a ciegas

Una vez un hombre se sentó en una cafetería y esperó a un amigo. Una chica se acercó y le preguntó:

– «¿Estás aquí en una cita a ciegas a través de la presentación de la tía Wang?»

Miró hacia arriba y la observó. Ella era el tipo de chica que le gustaba y decidió arriesgarse, así que respondió:

– «Sí, por favor, siéntate»

El día de su boda confesó que no esperaba a una cita a ciegas. La mujer sonrió y comentó:

– «Yo tampoco, fue sólo para encontrar una excusa para hablar contigo».

Cuando se presenta la oportunidad, no debes dudar en encontrar la forma de aprovecharla.

6. La picadura de un escorpión

Un maestro Zen vio un escorpión cayendo al agua y decidió salvarlo. Inesperadamente, el escorpión le picó el dedo. El maestro Zen no tuvo miedo y extendió su mano de nuevo, pero le picó de nuevo.

Un transeúnte dijo:

«El escorpión siempre te pica, ¿y aún así quieres salvarlo?»

El maestro Zen respondió:

«Picar es la naturaleza de un escorpión y la compasión es mi naturaleza. ¿Cómo puedo renunciar a mi naturaleza por su naturaleza?»

Siempre cambiamos nuestra naturaleza y nuestra intención original debido a los demás y al entorno externo. Así que dar la cara por ti mismo y permanecer fiel a tus valores es muy valioso.

Traducido por Joseph Wu y editado por Helen

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