Por Raven Montmorency
No es ningún secreto que el agotamiento es un problema real en la vida laboral en la actualidad.
Entonces, ¿cómo se puede superar el desgaste?
Con las crecientes exigencias del mundo moderno, es natural que cada vez más personas se sientan abrumadas y agotadas. De hecho, según una encuesta reciente, casi tres de cada cuatro estadounidenses dicen haber experimentado agotamiento en su trabajo.
Pero, ¿que significa exactamente el concepto de burnout? La 11ª Revisión de la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-11) lo define como:
«Un síndrome conceptualizado como resultado del estrés crónico en el lugar de trabajo que no ha sido gestionado con éxito».
En otras palabras, es cuando las exigencias de tu trabajo empiezan a hacer mella en tu salud física y mental. Y puede tener graves consecuencias. Los estudios han relacionado el agotamiento con todo tipo de problemas, desde la presión arterial alta y las enfermedades cardíacas hasta la depresión y la ansiedad.
Si te encuentras en una situación de agotamiento, puede que sientas que necesitas unas vacaciones -y es muy posible que así sea-, pero hay otras cosas que puedes hacer para empezar a sentirte mejor.
5 sugerencias para superar el desgaste
1. Habla con tu jefe
Si te sientes abrumado en el trabajo, el primer paso es hablar con tu jefe. Puede ser de gran ayuda que le expliques cómo te sientes y qué, concretamente, te está causando estrés. De este modo, él o ella puede ser consciente de la situación y ayudarte a encontrar una solución.
Tal vez haya una forma de delegar algunas de tus tareas o de asumir un papel diferente dentro de la empresa, o quizás el jefe pueda darte cierta flexibilidad con tu horario. Lo importante es mantener una conversación abierta sobre lo que ocurre y elaborar juntos un plan para ayudarte a superar el agotamiento.

2. Cuida de ti mismo
Es importante recordar que el agotamiento no sólo se produce en el trabajo. También puede ser provocado por otros factores de estrés en tu vida, como tus relaciones personales o tu situación económica. Por eso es tan importante cuidarse tanto dentro como fuera de la oficina.
Asegúrate de dormir lo suficiente, seguir una dieta saludable y hacer ejercicio con regularidad. También puede ser útil encontrar una afición o actividad que te guste y dedicarle tiempo en tu agenda.
Si no cambias cosas en tu vida, será muy difícil superar el desgaste.
3. Tómate un descanso
A veces, la mejor solución es simplemente tomarse un descanso. Esto puede significar tomarse unas vacaciones del trabajo o simplemente tomarse un tiempo libre para relajarse y recargarse.
También puede ser útil reducir el horario o trabajar menos días a la semana. Si es posible, intenta dedicarte un tiempo a ti mismo todos los días, aunque sólo sean unos minutos, desconectate de la tecnología y céntrate en algo que te haga feliz.

4. Busca ayuda profesional
Si probaste todo lo anterior y todavía te sientes abrumado, podría ser el momento de buscar ayuda profesional. Un terapeuta puede trabajar contigo para identificar la causa raíz de tu estrés y desarrollar un plan para abordarlo.
En algunos casos, también se pueden recomendar medicamentos. Si estás lidiando con el agotamiento, no dudes en buscar ayuda.
5. Busca un nuevo trabajo
Si nada te ayuda y sientes que lo has intentado todo, quizá sea el momento de buscar un nuevo trabajo. Puede ser difícil tomar esta decisión, pero a veces es lo mejor para tu salud mental.
Si tu trabajo actual te está causando un estrés excesivo, quizá merezca la pena considerar un cambio. Habla con tu jefe sobre tus opciones y busca vacantes en otras empresas.
A veces, un nuevo comienzo es todo lo que necesitas para sentirte mejor y superar el desgate.
Haz un plan, actúa y sé paciente
Una vez que hayas identificado la causa principal de tu estrés, es hora de elaborar un plan para abordarlo. Esto podría implicar hacer algunos cambios en el trabajo, buscar ayuda profesional o tomarse un descanso del trabajo. Una vez que hayas elaborado un plan, puedes pasar a la acción y empezar a trabajar para encontrar una solución.
Recuperarse del estrés puede llevar tiempo, así que es importante tener paciencia. Roma no se construyó en un día, y tu recuperación tampoco. Puede llevar algún tiempo hacer cambios o encontrar un nuevo trabajo.
Y podría llevar aún más tiempo recuperarse de los efectos físicos y emocionales del agotamiento. Pero si tienes paciencia y sigues trabajando para encontrar una solución, al final empezarás a sentirte mejor y descubrirás que puedes superar el agotamiento.